El otro día me encontré en la cartelera de cine con Blue Valentine, una película indie americana. Me llamó la atención el título pero en cuanto vi quien era el protagonista, Ryan Gosling, no dudé en ir a verla.
A este actor le conocí en la película "Lars and the real girl" (en español, Lars y una chica de verdad). Una película del año 2007, comedia romántica indie que me encantó cuando la vi en la pequeña sala de cine que compartí con dos parejas maduras y un chico joven. Todavía me acuerdo del momento ambulancia, surrealista y absurdo, qué risas en la sala. El actor protagonista era Ryan Gosling, borda el personaje. Una película recomendable.
Año 2013, de nuevo me encuentro con él, yo sentada en la butaca del cine observando su nueva interpretación, la de Dean.
Blue Valentine cuenta la historia de Dean y Cindy, una pareja en crisis que lucha por sacar a flote su relación. Para llegar a este momento de crisis la película está repleta de flashbacks donde nos enseñan como se conocieron, dónde y cuándo surgió el amor, provocando que algunas escenas te sientas identificado e incluso te pongas de "parte" de alguno de los personajes.
Una película con una historia muy simple, nada compleja haciéndola atractiva porque dentro de su simpleza esconde una gran complejidad. Una historia de amor que puedes encontrar a la vuelta de la esquina y lo que más me gusta que evita tópicos y estereotipos. Se agradece encontrar guiones sencillos y huir de las historias complejas con grandes giros y recovecos y finales inesperados. Se podría decir que es innovador encontrar un guión tan sencillo, contando una historia de amor donde las situaciones, localizaciones y personajes se presentan en la medida de cualquier mortal sintiéndote identificada
Es una historia de amor que penetra en las zonas más rosadas como en las más cruentas de una relación, huye de los clásicos amores de película, por eso hace tan especial la película. Hace hincapié en todos los aspectos de una pareja: el matrimonio para toda la vida, las situaciones que se vuelven insostenibles dentro de una relación, el amor que muere. Lo dicho, el amor en estado puro, no os esperéis el "séptimo arte" con parejas felices y parejas ideales.
Los actores están impresionantes en sus papeles sobretodo Ryan Gosling, dando tanta realidad a las situaciones que pareciese que lo hubiera vivido antes. Espero que no pasen 6 años para volver a verle de nuevo, je.
Me gustó la película por contar una historia tan real que muchas veces no queremos ver, y es cuando el amor muere.
