Hoy todos miramos a Grecia, casi obligados, porque los medios de comunicación no dejan de enseñarnos imágenes de Atenas. La que más me gusta es ver al pueblo concentrado en la Plaza Syntagma diciendo "no a la austeridad". Pero a la mass media le gusta más las colas en los cajeros automáticos, o algún que otro turista intentando sacar dinero...
Y es que parece que el referéndum propuesto por el gobierno griego y aprobado por el Parlamento no es de un país serio y democrático. Pero ¡donde se ha visto! ¡un país preguntando a los ciudadanos si están de acuerdo con las condiciones de la Troika, FMI, BCE! Una lección más de democracia de los griegos ante la UE, ésta última más preocupada en rescatar bancos privados que ayudar al pueblo y en último caso chantajeando.
Una economía, como la griega, que está debilitada, no se le puede exigir más recortes o medidas más impositivas. Se le está aplicando una "sangría económica", cuando se ha demostrado estos últimos años, con varios datos estadísticos y humanos, que las medidas impuestas desde la Troika no han servido para nada, sólo han empobrecido más el país.
Se puede salvar a Grecia, sólo que no interesa. Es mucho mejor ponerles de malos, vagos, irresponsables. Se les inyectó dinero a la banca para pagar a los acreedores (banca alemana principalmente) que son los mismos que les prestan dinero, no para sanear una economía muy debilitada y "muy conocida por todos los órganos internacionales". Tsipras heredó esa economía. Él busca una solución al pueblo heleno, la Troika no.
Mucha suerte Grecia. Yo voto OXI.
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