a vista de pájaro

Un amigo me enseñó a contemplar las ciudades desde las alturas. 

Por la abrupta Atenas, rodeada de colinas, la subida al Licabeto tiene como recompensa una panorámica espectacular de la ciudad.

La Italia renacentista, con sus "duomos" y su subida a los "campaniles", regala vistas de pueblos y campos del norte de Italia impresionantes.

Las subidas pueden ser tediosas, cansinas o pesadas, pero una vez llegas a la "cima", todo se olvida al fijar los ojos ante lo que tenemos delante, la ciudad desde las alturas. Una belleza.

Gracias Diego.